Las personas alrededor del mundo están en la constante búsqueda de formas de multiplicar su dinero. Hoy te damos algunos consejos a la hora de invertir
En la actualidad, son muy pocas las escuelas que enseñan educación financiera. El correcto manejo y administración de nuestro dinero puede marcar la diferencia entre vivir al límite económicamente, o tener salud financiera. La inversión es uno de los puntos más importantes a considerar para llegar a la libertad financiera. Por eso te daremos algunos consejos a la hora de invertir tu dinero.
La inmensa mayoría de las personas busca siempre la forma de tener más dinero, pero la mala planificación económica hace que hagan gastos innecesarios o inviertan de manera incorrecta. Más allá de cuántos sean tus ingresos, debes preocuparte siempre por la administración de tus fondos, dejando también un porcentaje para la inversión.
¿Qué es la inversión?
La inversión es, en palabras simples, la utilización de un recurso que tengas a disposición para obtener ganancias a mediano o largo plazo. Es decir, la utilización de una cantidad de dinero en un fin que te haga el retorno de dicha cantidad y genere rentabilidad. El gran objetivo de la inversión es que el retorno (ganancia) sea superior al monto dispuesto inicialmente.
Existen múltiples tipos de inversión, y es justo por esto que empezar a invertir puede llegar a ser complicado para muchos. El desconocimiento es la principal causa de las pérdidas de dinero, y por eso es de suma importancia que sigas algunos consejos a la hora de invertir para que no vayas a la quiebra.
Consejos a la hora de invertir para hacerlo de forma efectiva
1. Investiga
En cualquier listado de consejos para ser un buen inversor se te recomendará la diversificación. Los grandes inversores tienen un amplio portafolio de acciones y activos, entre los que puede haber acciones de empresas, divisas, criptodivisas, bonos, plazos fijos, etc. Sin embargo, es importante, antes de hacer inversiones de forma diversificada, conocer el mercado.
La primera recomendación, en este sentido, es no invertir en nada que no conozcas. A la hora de invertir tu dinero, es importante que sepas muy bien en qué estás invirtiendo, por qué es una buena opción para invertir, y cómo se está moviendo ese mercado en específico.
Variables como la rentabilidad posible, el porcentaje de riesgo, el horizonte temporal y la liquidez son solo algunas de las cosas en las que tienes que fijarte antes de poner tu dinero en cualquier activo financiero.
Una buena investigación y análisis pueden marcar una inmensa diferencia entre generar ganancias y ver cómo tu dinero se evapora con una mala inversión. Así que, no tomes decisiones precipitadas, e infórmate correctamente sobre en qué estás invirtiendo tu dinero.
2. Consulta siempre con fuentes oficiales
Es fundamental para cualquier inversor contar con información fidedigna a disposición. Entes gubernamentales en casi todos los países cuentan con información detallada con respecto a la cotización de las empresas, así como las entidades de inversión y los productos que se comercializan.
Si bien es necesario consultar múltiples fuentes para poder saber cuándo entrar y salir en la bolsa o cualquier activo, siempre es necesario contrastar la información con fuentes oficiales. Un correcto balance entre fuentes oficiales y extraoficiales pueden hacer que tomes las decisiones adecuadas, en el tiempo correcto.
Recuerda que, al hablar de inversiones en bolsa o mercados de valores, los tiempos son fundamentales, especialmente en mercados volátiles. Un buen timing marcará la diferencia entre ganancias y pérdidas.
3. Conoce tu perfil de inversión
Una vez conociendo los mercados y teniendo las fuentes adecuadas para realizar tus análisis, llega el momento de definirte como inversor. Para esto debes saber qué tipos de inversores existen.
Los inversionistas suelen clasificarse por su capital y por los niveles de riesgo que asumen a la hora de invertir. En este sentido, es de suma importancia saber cuál es tu perfil, ya que de esto dependerán tus porcentajes de rentabilidad y los sistemas que uses para hacer tus inversiones.
Inversionista moderado
Los inversores moderados son aquellos que establecen un buen balance entre rentabilidad y riesgo. Es decir, que no tienden a tomar grandes riesgos, por lo que sus niveles de rentabilidad no son demasiado altos. Por lo general son de un 10% o 15% a mediano plazo.
Por lo general, los inversionistas novatos tienden a iniciar con un perfil moderado, sin tomar grandes riesgos mientras obtienen la experiencia y conocimientos necesarios para dar un paso más allá.
Inversionista de riesgo
En este grupo se clasifican los inversionistas con experiencia y conocimientos de las distintas herramientas financieras, que se disponen a tomar mayores riesgos en busca de mayor rentabilidad.
Si bien este tipo de inversiones suponen ganancias mucho mayores, el riesgo de pérdidas también es mucho más alto, por lo que no debes dejarte llevar únicamente por los porcentajes de rentabilidad. Asegúrate de estar totalmente informado sobre los activos financieros en los que planeas invertir antes de lanzarte por un riesgo mayor.
4. Diversifica
Tal y como mencionamos en el primer punto, es importante diversificar. Ningún gran inversionista pone todos los huevos en el mismo canasto, y es esto lo que les ayuda a generar mayores ganancias y a reducir considerablemente los riesgos de inversión. Hay distintas formas de diversificar tu portafolios.
Por empresas
Consiste simplemente en repartir el capital que dispongas para la inversión en distintas empresas. De esta manera, si alguna pierde valor o va a la quiebra, no estará en juego todo tu capital.
Por sectores
En muchos casos, la fluctuación de los mercados se da por sectores, por lo que resulta conveniente diversificar en empresas de distintos sectores. Por ejemplo, si cae una inversión en petróleo, difícilmente afecte a otra del sector de tecnología. En cambio, de tener inversiones en puras materias primas, es probable que la caída de una arrastre a otras.
Por geografía
De la misma forma a cómo ocurre con los sectores, en muchos casos las inversiones se van al alza o a la baja en base a su ubicación geográfica. Al tener tus inversiones distribuida en distintos países, tus inversiones estarán más seguras ante el riesgo de caídas de valores por región.
Por divisas
Claramente, las divisas están en constante fluctuación, lo que afectará de forma directa a tus inversiones. Si tienes tus inversiones en distintas divisas, lograrás prevenir una caída de alguna moneda en el mercado.
La diversificación de las inversiones actúa como cortafuegos a la hora de que algo salga mal. Al reducir considerablemente los riesgos de pérdida, claramente tendrás mayores ganancias. Es por esto que debes armar cuidadosamente un amplio abanico de inversiones.
También es importante que sepas que, mientras más amplio sea el abanico de inversiones, mayores análisis tendrás que realizar, ya que debes estar al pendiente de cada una de tus inversiones y sus respectivos mercados.
5. Invierte dinero del que no requieras en ese momento
Es de suma importancia saber que, en gran parte de las inversiones, especialmente siendo principiante, los resultados no se verán a corto plazo. Lo más común es iniciar con tasas de rentabilidad bajas, a mediano o largo plazo.
Es por esto que resulta importante que, el dinero que dispongas para hacer tus inversiones, no lo necesites a corto plazo. Al hacer una inversión, debes estar consciente que, probablemente, el fruto no lo veas de forma inmediata, o que incluso existe el riesgo de pérdida, pese a llevar una estrategia muy conservadora.
Siempre es preferible ahorrar un poco más de dinero, de modo que uses una porción de tus ahorros que no necesites o que estés dispuesto a perder en caso de que algo no salga tal y como lo planeaste. De seguir las estrategias correctas y hacer buenos análisis, seguramente verás rentabilidad a mediano o largo plazo.
6. Ignora los rendimientos pasados
Uno de los errores más comunes que cometen los inversionistas que recién comienzan es guiarse por rendimientos que han tenido activos específicos en el pasado. Los rendimientos no siempre se repiten con el paso del tiempo, por lo que apostar por un activo únicamente por el hecho de que haya tenido un crecimiento abrupto en el pasado, te puede llevar a perder dinero.
Los mercados, en muchos casos, son imprevisibles, y los crecimientos más altos de la última década lo demuestran. Muy pocos vieron venir el crecimiento de los activos más populares de la actualidad, como por ejemplo, el caso emblemático de Bitcoin.
7. Infórmate sobre la herramienta a utilizar
Hoy en día, lo más común en el mundo de las inversiones son los software de bolsa vía Internet, o la inversión vía plataformas de intercambios de activos. Existen cientos de opciones en el mercado, y cada una de ellas cuenta con políticas distintas.
Es de vital importancia que sepas cómo funciona la herramienta financiera que decidas utilizar, ya que en base a esto es que debes calcular la rentabilidad. Muchos principiantes calculan su rentabilidad sin tomar en cuenta las comisiones de la plataforma que usan o de sus brokers, por lo que, incluso llegando al objetivo, pueden perder dinero.
Infórmate bien sobre las políticas, comisiones y procesos que involucra cada una de las plataformas que uses para invertir.
8. Sé constante
Como muchas otras actividades, la inversión requiere de paciencia y disciplina. Los grandes inversionistas dedican horas al análisis de sus inversiones, y aguardan los plazos que sean necesarios para obtener resultados. En muchos casos, el trabajo de los inversionistas consiste en pasar horas viendo gráficos, por lo que debes tener paciencia y constancia.
9. Busca asesoría
Uno de los consejos a la hora de invertir que no debes omitir es la asesoría. Es inmenso el número de personas que deciden aventurarse en el mundo de las inversiones por su propia cuenta, y en muchos casos es por los costos de la asesoría.
Una buena asesoría puede ser la clave para que tu inicio en el mundo de las inversiones sea exitoso. Siempre es importante contar con la información correcta a la hora de invertir, y un asesor bien preparado puede darte todas las claves que necesitas para triunfar como inversor y evitar pérdidas catastróficas.
Es importante que sepas que, si bien muchos asesores pueden cobrar cantidades significativas, tu balance general será positivo en caso de dar con el asesor indicado. Es por esto que no está nada mal poner el monto que cobra el asesor en tu estructura de costos, y así multiplicar tus ganancias.
El asesor también podría evitar que cometas típicos errores de inversores con poca experiencia, por lo que puede salvar tu dinero.
Invierte en educación financiera
Como conclusión, uno de los mejores consejos a la hora de invertir que te podemos dar, es justamente invertir en tu educación financiera. En la actualidad, los conocimientos están al alcance de todos con un simple clic, así como cuentas con las opciones de los libros, o cursos básicos de finanzas.
La inversión de tiempo y/o dinero en tu educación puede cambiar drásticamente tu vida, más allá de tus actividades como inversor. El manejo y la gestión del dinero son fundamentales para la vida diaria, y el buen manejo de las finanzas marcará una inmensa diferencia en tu estilo de vida.
La inversión es solo uno de los puntos clave para tener salud financiera, ya que puede llevarte a transformar tus ahorros en más dinero. A su vez, una buena inversión podría transformarse, a mediano o largo plazo, en ingresos pasivos con los que contarás durante un período o incluso de por vida.
Solo con buena educación financiera podrás dejar de vivir al día económicamente, y podrás pasar a generar rentabilidad de tus ahorros e ingresos, por lo que debes poner manos a la obra y tomar las riendas de tus finanzas.
Lee, investiga, estudia, pide consejos, contrata asesores, participa en foros, inscríbete en cursos… todas estas acciones pueden cambiar totalmente tu vida. La información, el estudio y la disciplina te permitirán pasar de ser un principiante, a convertirte en un gran inversionista.
Sigue estos consejos a la hora de invertir, y pon en marcha el inicio de tu educación, para que luego puedas entrar en el mundo de las inversiones y puedas generar rentabilidad de tu dinero. El camino puede llegar a ser largo, pero lo más importante es que cumplas con tus objetivos.