Comprar un auto es una aspiración que muchas personas tienen. Es importante que consideres varios aspectos cuando decidas a hacerlo
Actualmente existen muchas formas para que el proceso de comprar un auto, sea sencillo. Y al mismo tiempo, no implique una pérdida de dinero.
Aquí te presentamos varios tips para que la adquisición de ese vehículo que tanto deseas, sea posible, y esté enmarcada en una estrategia financiera inteligente.
Opciones de financiación para comprar un auto
A menos que cuentes con la totalidad del dinero necesario, lo ideal es analizar qué opciones tienes para poder pagar de forma fraccionada o por cuotas el vehículo.
Muchos consideran que, después de la adquisición de una vivienda, la compra de un auto es uno de los gastos más importantes para la economía personal o familiar. Y sin duda, ese gasto tiene un impacto relevante en tus finanzas personales.
En consideración a esto, debes tomar en cuenta una diferencia importante respecto a la adquisición de una vivienda. La compra de un auto es un gasto de consumo y no una inversión, puesto que una vivienda tiende a revalorizarse con el tiempo y los autos pierden valor a medida que pasan los años.
Por esa razón, los expertos en finanzas no te recomiendan comprar un auto si tu presupuesto es limitado, puesto que no lo podrás recuperar.
Sin embargo, si aún así quieres comprar un auto por otras ventajas que representaría para ti, puedes buscar opciones de financiamiento como un préstamo bancario, financiamiento directo con el concesionario, o incluso el leasing. En estos casos debes considerar aspectos como:
- Escoge un vehículo cuyas cuotas a pagar se encuentren dentro de tus posibilidades reales.
- Ahorra lo suficiente para cubrir más de la cuota inicial.
- Visita a varios concesionarios, para que puedas analizar las distintas opciones de precios y programas de financiamiento disponibles.
- Analiza bien las opciones de financiamiento que te propongan las instituciones financieras.
- Considera la opción que presente el menor costo y plazo de amortización posible.
Evalúa las opciones para comprar un auto que se ajusten a tu realidad financiera
Lo ideal es que escojas un auto que cumpla con tus expectativas pero sin que te lleve a salirte de tu presupuesto. Esto implica además de considerar la cantidad que tendrás que pagar por cuotas, los gastos conexos que conlleva la adquisición de un vehículo como: cuotas del seguro, impuestos, gastos de mantenimiento del vehículo, etc. En este punto deberíamos tener muy en cuenta dos aspectos primordiales:
La cuota inicial
Debes tener ya una cantidad de dinero que te permita cubrir la cuota inicial que en la mayoría de los casos te van a solicitar a la hora de concretar la compra financiada del auto.
Ahora bien, es importante que ese dinero no solo cubra la cuota inicial mínima para cerrar la negociación. También, sería ideal que ese dinero a pagar, cubra una cantidad mucho mayor de lo que se pide como pago inicial.
Recuerda que cuanto más pagues de entrada, menores serán los montos de las cuotas mensuales a pagar a futuro.
La elección del vehículo
Debes tener ya claro qué auto deseas adquirir. Tener información detallada de las características puntuales del carro, será clave para poder hacer una negociación exitosa. Adicionalmente, esto te ayudará a precisar si ese vehículo tiene las características para cubrir tus expectativas.
Algo que debes hacer, es informarte bien sobre la oferta de marcas y modelos, antes de visitar los distintos concesionarios. De esta manera ya podrás decidirte sobre algunos aspectos importantes.
Financiamiento bancario para comprar un auto
Cuando te preguntas sobre cómo comprar un auto, la alternativa del financiamiento bancario, suele ser la primera en la que pensarás. Es por ello que es muy importantes que consideres aspectos como:
- La tasa de interés.
- La comisión de apertura.
- La comisión de amortización anticipada.
- Importe máximo de financiamiento.
- Cuotas mensuales.
- Plazo para pagar.
Estos elementos serán determinantes para cuando llegue el momento de decidirte por alguna de las opciones de financiamiento bancario.
Cuando estés en el proceso de negociación con el banco, siempre solicita información detallada de cómo sería la estructura de los pagos programados durante el plazo que dura el financiamiento.
Este punto es fundamental para poder planificar y programar mensualmente los gastos relacionados con el pago del vehículo. Este elemento es clave a la hora de organizar el presupuesto familiar en el corto y mediano plazo.
Siempre es bueno lograr un equilibrio entre los plazos y las cuotas mensuales a pagar. Esto permitirá mantener la programación presupuestaria antes señalada.
En este proceso debe tener en cuenta dos factores fundamentales; la primera, relacionada con el gasto relativo a los trámites legales y notariales para obtener la propiedad del vehículo; y, la segunda, considera que el banco antes de otorgar el crédito, evaluará detenidamente tu capacidad real de pago.
En este punto es importante cumplir a cabalidad con todos los recaudos que solicite el banco. De esta forma, tendrás más posibilidades de que la respuesta sea favorable.
Durante el período de negociación, podrías intentar negociar con el banco el diferimiento del pago de la comisión de amortización anticipada, de forma que puedas pagarlo en un lapso posterior. Esto aumentaría tu margen de maniobra desde el punto de vista financiero.
El financiamiento a través del concesionario
Otra de las alternativas a considerar es el financiamiento de los propios concesionarios. En la actualidad, son muchos los concesionarios que ofrecen la oportunidad de otorgar financiamiento propio, para los clientes que deseen adquirir un auto.
Esta opción de financiamiento, suele ser similar a la que aplican los bancos, en lo relativo a los intereses y cuotas a pagar. La diferencia está en que por regla general, son más flexibles en cuanto a los recaudos y tiempos de respuesta de las solicitudes, pero usualmente debes contratar un seguro con la compañía que indique el concesionario.
Si decides escoger esta alternativa ten en cuenta las condiciones de pago, las cuotas a pagar y los gastos adicionales ya mencionados antes. También es recomendable que evalúes distintas opciones de financiamiento en distintos concesionarios. Esto te permitirá comparar la alternativa que más se pueda ajustar a tu presupuesto.
Leasing y renting
Estas dos opciones, el leasing y renting, si bien son poco conocidas para muchos, son alternativas a tener en cuenta, cuando estás pensando en comprar un auto. Es importante que te informes y tengas claro en qué consisten estas opciones, así como sus características más resaltantes:
Leasing
Este método de compra implica, necesariamente, que debe hacerse a nombre de determinada empresa o actividad profesional. Es decir, el leasing es un mecanismo que sólo se ofrece a empresas o trabajadores independientes.
Se considera como una fórmula de «arrendamiento financiero», puesto que sería un alquiler (del vehículo) con opción a compra, al finalizar la duración del contrato, que suele ser entre 24 y 72 meses.
Al finalizar ese lapso, el titular tiene la opción de adquirir el vehículo, pagando una cuota residual estipulada en el mismo contrato.
Las empresas y los trabajadores independientes pueden financiar en un 100% el valor del vehículo, sin pagar una cuota inicial. Una de las ventanas del leasing tiene que ver con su tratamiento fiscal favorable, en la mayoría de las legislaciones que hablan sobre los impuestos a la renta o al patrimonio.
Renting
El renting no es una alternativa para comprar un vehículo, pero dependiendo de tus circunstancias podría ser una alternativa que te funcione en el corto plazo. El renting más que un mecanismo de alquiler de largo plazo. Por lo general, suelen abarcar un periodo de 3 a 5 años. Las cuotas mensuales que se manejan por el alquiler, incluyen por regla general:
- Impuestos de matriculación y registro del vehículo
- Seguro contra todo riesgo
- Servicio de mantenimiento
- Reparaciones
- Cambio de neumáticos
- Asistencia en viajes
- Servicio de grúa en caso de accidentes
La diferencia del renting con el leasing, es que al final del periodo de duración del contrato, no existe la opción a compra. Por lo tanto debe devolver el vehículo o renovar el contrato de alquiler.
Sin embargo, esta alternativa es una ventaja para aquellas personas que desean no preocuparse por los gastos inherentes al mantenimiento del auto.
Así mismo, suele ser una opción ideal para aquellas empresas, cuyos empleados suelen ser rotados geográficamente con frecuencia. Y debido a ello, se reducen los plazos de tiempo de traslado del empleado a otro lugar, debido a que el vehículo es alquilado y no debe hacer un proceso de venta, previo a su mudanza.
Otras opciones que tienes para comprar un auto
Para comprar un auto tienes otras alternativas totalmente viables y accesibles. En este caso, te nombramos algunas:
Considerar la adquisición de un carro usado
Muchas empresas y particulares suelen vender sus vehículos al cabo de pocos años . Por regla general, tienden a tener poco uso, así que son una alternativa válida a tener en cuenta.
En los últimos años, el mercado de carros usados está en auge por muchas razones. Las dos más comunes son porque:
- Suelen presentar precios más asequibles
- Muchas empresas deciden renovar con frecuencia su flota de vehículos, por políticas internas.
En todo caso, es importante a la hora de adquirir un auto usado, ser muy cuidadoso con los detalles y condiciones del carro a adquirir, por lo que es muy conveniente que te asesores con un mecánico de confianza para que puedas checarlo con bastante precisión. Esto te permitirá detectar posibles fallas, que pudieran convertirse en potenciales problemas y gastos.
También debes estar muy atento con los permisos y documentos legales del carro. Es importante validar que todo esté en conformidad con la ley, a fin de evitar inconvenientes administrativos y gastos innecesarios.
Ten en cuenta que la mayoría de los concesionarios de carros nuevos, tienen una sección de carros usados, así que ten esto presente a la hora de buscar opciones de vehículos.
Considerar la alternativa del carro «kilómetro 1»
En ocasiones, los concesionarios matriculan una determinada cantidad de carros al mes, para cumplir con una cuota preestablecida con la empresa ensambladora. Por lo tanto, deben matricular algunos vehículos a nombre del propio concesionario. Ya al tener placa y registro, se suelen considerar «carros usados».
Ya por ese simple hecho, el precio del vehículo se reduce y sin duda alguna es una alternativa excelente que no debes de dejar de considerar cuando te decidas a comprar un auto.
Estos carros en oferta son buenas oportunidades a tener presente. En ciertas épocas del año, suelen venderse en los concesionarios este tipo de vehículos. Así que se recomienda estar muy atento con las ofertas que a veces se presentan en estos establecimientos.
No olvides el seguro para autos
Al momento de plantearte comprar un auto, un elemento clave es el relacionado con la adquisición del seguro. Debes estar consciente de que estarás sujeto a diferentes riesgos. Por lo tanto, es importante contratar un seguro que cubra los riesgos de accidentes y garantices respaldo financiero ante la ocurrencia de algún evento.
En todo caso, al adquirir un vehículo nuevo es obligatorio en muchos países la contratación de una póliza contra riesgos, así como un seguro de responsabilidad civil.
Muchas veces esas pólizas, no cubren la totalidad del valor del vehículo adquirido, por lo que sería importante que se consideren otros contratos de seguros que permitan ampliar esa cobertura.
Los principales tipos de seguros de autos, que suelen ofrecer las empresas aseguradoras son las siguientes: Seguro frente a terceros y contra todo riesgo.
La mayoría de las empresas del sector ofrecen diferentes opciones de financiamiento y condiciones de uso de las pólizas. Se recomienda ver el mayor número de ofertas existentes, y ponderar las que se ajusten mejor a tu presupuesto. Lo importante es que no las descartes, primero porque por ley estás obligado a tener una póliza de responsabilidad civil, pero también es importante proteger tu patrimonio.
Como puedes ver, cuando te decidas a comprar un auto debes considerar varios aspectos. Debes evaluar muy bien la oferta de opciones de carros disponibles. Así mismo, analizar las opciones de financiamiento posibles, escoger la alternativa que se adapte a tu presupuesto y a tus circunstancias específicas y, además considerar aspectos conexos como gastos de mantenimiento y la contratación de una póliza de seguro.