La bolsa o la vida, ver las finanzas personales desde una perspectiva psicológica
La bolsa o la vida, publicada por primera vez en 1992, es una obra de los estadounidenses Vicki Robin, Joe Domínguez y Monique Tilford.
Es un libro que ahonda en el tema de la relación que tenemos con el dinero, pero desde un trasfondo psicológico. Para los autores, cada persona debe buscar los elementos centrales de su vida y a partir de ahí, alinearlos con sus objetivos financieros y trabajar en relación a éstos.
La bolsa o la vida plantea interrogantes válidas respecto a la relación que tenemos con el dinero, partiendo desde los elementos del por qué y el para qué lo buscamos.
Para ello, uno de los primeros aspectos que plantean los autores es evaluar cuál es nuestro sueldo por hora real. Es decir, calcular dentro de nuestros gastos, aspectos considerados por otros como irrelevantes, como el tiempo de traslado de un sitio a otro o la vestimenta que usamos.
La intención de esto va enfocada en evaluar qué tanto valor le estamos dando a aspectos fundamentales de nuestra vida, como el tiempo.
Para los autores, el propósito de este análisis es ver por cuánto dinero realmente nos estamos esforzando; y al mismo tiempo, bajo qué condiciones reales ofrecemos nuestro tiempo a los demás.
La bolsa o la vida: el dilema de saber cuánto es suficiente
En el libro, se plantea un elemento central que nos permite ver la arista psicológica en relación a nuestra relación con el dinero. Para la mayoría de las personas, nunca se alcanza lo suficiente, hay una inconformidad siempre presente en lo que queremos y deseamos.
Siempre se desea tener más cosas, sin embargo, en La bolsa o la vida, los autores afirman que la inmensa mayoría de las personas no tienen claro qué es suficiente para cada una de ellas.
Los autores consideran que lo fundamental es cubrir todas las necesidades básicas. Después de ese punto, lo importante es lograr una relación consciente y clara con el dinero, independientemente de la cantidad que se reciba a lo largo del tiempo.
En La bolsa o la vida, se plantea un factor que para la mayoría de las personas es su punto débil en cuanto a gastos se refiere. Es la tendencia a seguir adquiriendo aquello que ya poseen, sin importar si se tiene mucho o poco dinero.
Para los autores, esta situación claramente irracional, tiene un trasfondo interno y psicológico que quieren cubrir con una satisfacción externa.
En la obra se plantean nueve grandes ideas fundamentales, que nos permitirían reducir situaciones como estas, y fortalecer nuestra estabilidad financiera.
Analizar los gastos, una forma de decidir entre la bolsa o la vida
En la bolsa o la vida, el primer paso que se propone es precisar y concientizarse sobre los ingresos que hemos tenido a lo largo de nuestra vida. La intención de esto es saber cuánto hemos percibido desde que empezamos a ser económicamente activos, es decir, cuánto hemos generado en dinero.
Partiendo de esa relación histórica, se propone ver qué percibimos en el presente, para saber qué tanto hemos controlado nuestras finanzas hasta ese momento.
Pasado ese punto, la segunda idea central que se plantean En la bolsa o la vida, tiene que ver con lo que ganamos por cada hora de trabajo. El punto de esto es saber exactamente, cuánto percibimos en la actualidad y compararlo con todos los gastos que generamos a diario.
Aquí se propone incluir todo lo que gastamos, desde lo relacionado al transporte, vestimenta, comida y diversión, entre otros.
Posteriormente, se plantea un tercer paso que tiene que ver con empezar a registrar de forma más minuciosa, el dinero que entra y sale de nuestros bolsillos. La finalidad es generar un registro pormenorizado de forma diaria, semanal y mensual de entradas y salidas de dinero.
Dicho en otras palabras, generar un registro contable personal. Precisando lo que ganamos por hora y día, podemos saber realmente cuánto debemos trabajar para poder cubrir esos gastos que tenemos.
Evaluar nuestros gastos, desde la prespectiva de La bolsa o la vida
En La bolsa o la vida, el cuarto aspecto a tener presente tiene que ver con la evaluación de nuestra relación personal con los gastos. Aquí los autores ahondan en el aspecto psicológico, es decir, saber si esos egresos están satisfaciendo plenamente nuestras necesidades.
Los autores concluyen que la mayoría de los gastos de dinero y tiempo son elementos motivadores para seguir generando más dinero, pero no están reflejando de forma verdadera lo que es relevante para cada persona.
Posteriormente, se propone un quinto paso, este tiene que ver con hacer una comparación gráfica de nuestros ingresos y gastos a través del tiempo. La intención de esto es generar una concientización y racionalización de nuestros gastos y evitar que superen los ingresos a futuro.
Al hacer este análisis gráfico, podremos empezar a plantearnos metas más realistas en pro de nuestra independencia financiera. Será un factor motivacional, para ir controlando nuestros gastos mensuales y, por otro lado, buscar estrategias para generar más dinero.
Vivir de forma más sensata
El sexto paso a tener en cuenta tiene que ver con controlar los gastos y a darle valor real a nuestro tiempo. La idea central aquí es empezar a vivir de una forma más modesta, sin excesos en cuanto a gastos, principalmente los innecesarios.
Luego, en La bolsa o la vida se plantea un séptimo punto central, que usualmente se llega de forma natural. Este punto tiene que ver con la evaluación de nuestro trabajo, ver si realmente concuerda con nuestros valores y propósitos de vida.
Al hacer esa evaluación de nuestro trabajo actual, nos llevará a concluir si realmente este nos llena de forma profesional y personal y, sobre todo, si el tiempo invertido en él está valiendo la pena. Si la respuesta a esto no es positiva, debemos considerar otras opciones de trabajo más acordes con nuestros objetivos.
Posteriormente se propone un octavo paso que tiene que ver con encontrar ese punto de equilibrio. La idea sería racionalizar las prioridades para lograr reducir nuestros gastos y éstosque sean menores que los ingresos, para poder invertir el excedente.
Ya en este punto, entramos en el tema de la libertad financiera. Puesto que, ya estamos buscando formas de generar inversión e ingresos adicionales, más allá de nuestras entradas habituales de dinero.
Por consiguiente, en La bolsa o la vida se propone un noveno y último paso, el relacionado con hacer crecer esas inversiones. Aquí, los autores plantean que las personas podrán gestionar su dinero en tres grandes áreas:
El capital
Será el punto clave de la independencia financiera, por cuanto la meta es ir incrementando éste con las inversiones que se hagan.
La reserva de seguridad
Será una partida de dinero necesaria para cubrir los gastos de un período de corto y mediano plazo, es decir, entre 6 meses a un año.
La reserva secreta
Será el dinero sobrante obtenido de las inversiones. Esta partida se puede usar perfectamente para la adquisición de aquellas cosas que deseas. También puedes usarla para invertir en cualquier actividad que no necesariamente tiene fines lucrativos como son las donaciones.
En síntesis, la bolsa o la vida plantea el tema de la administración del dinero con un trasfondo psicológico, propone al lector que evalúe dentro de sus relaciones de ingresos y gastos, aspectos que aunque parezcan irrelevantes para muchos, son fundamentales para nuestras vidas, como el tiempo.
Se busca que el lector reformule la relación que ha tenido con el dinero, para que puedar realizar una gestión mucho más exitosa, a fin de que le sirva de motor a su crecimiento financiero.