Atrévete a conocer los acuerdos de Miguel Ruiz para comenzar a cambiar positivamente tu estilo de vida y tu forma de percibir el mundo. ¡No te arrepentirás de leer este resumen del libro los 4 acuerdos!
Miguel Ruiz es autor de textos espiritualistas y de desarrollo personal que logran sembrar la semilla de la auto-aceptación y la auto-realización. Uno de sus textos más famosos y aclamados por la crítica es el libro los 4 acuerdos, que en pocas palabras es una guía para la deconstrucción y la aceptación del individuo.
El autor mexicano comienza la obra con una gran reflexión: siempre hemos sido lo que otros han querido que seamos. Señalando que desde la crianza se nos ha disciplinado a través de las recompensas y los castigos. Por lo tanto, en la adultez hemos creado una enorme dependencia a la aprobación o recompensa exterior y un miedo irracional a fallar o desviarnos de los estándares impuestos.
Aceptamos normativas, creencias, tradiciones y una forma de hacer las cosas sin cuestionarnos las mismas. Porque todos estos lineamientos son pasados de adultos a niños. Así como el lenguaje mismo, se les enseña la forma en la que estos deben comportarse por el resto de sus vidas. Desde la infancia se establece lo bello y lo feo, lo bueno y lo malo, y en la adultez aceptamos o incluso defendemos estas creencias.
La domesticación
Pero ¿Realmente te dieron para escoger? ¿Eres la misma persona desde que naciste o fuiste modificado por estándares? E incluso en muchas ocasiones, luego de ver el panorama de posibilidades, decidimos limitarnos y seguir defendiendo creencias impuestas.
Porque aquella domesticación que se sufre desde la infancia te convierte en el peor juez, un ser de auto-domesticación y castigo. Por ello, Miguel Ruiz lleva a otra poderosa reflexión: tú mismo eres la persona que más te juzga, recrimina acciones y te hace daño. Pero, ¿estás dispuesto a romper estos acuerdos y estándares? ¡Comienza aprendiendo los 4 acuerdos!
¿En qué consiste el libro los 4 acuerdos?
Este maravilloso libro es una joya de la autoayuda y la autorrealización, ya que sus consejos son orientados a una vida más plena. Una vida nueva, liberada de las creencias y los estereotipos impuestos en la familia, la iglesia o la sociedad. En sus 65 páginas encontrarás dividido en capítulos los 4 acuerdos o los 4 mejores consejos que ofrece Miguel Ruiz para comenzar a vivir una vida plena y tranquila.
Estos acuerdos son compromisos valiosos para crear nuevos hábitos que transforman tu vida, te permitirán ser feliz y estar en armonía con los demás. Todo este texto se inspira en la espiritualidad de la cultura tolteca de México, de la que el autor pertenece y admira.
Los hábitos son una muestra de la voluntad y constancia de un individuo, luego de 4 semanas perseverando lo que has acordado, podrás decir que has adoptado un hábito. Los cuatro acuerdos que nos comparte el autor, son: sé impecable con tus palabras, no te tomes nada personal, no hagas suposiciones, y haz siempre tu máximo esfuerzo.
De este modo, con una redacción cotidiana y amena, el escritor mexicano nos relata sus más preciadas reflexiones y esfuerzos para lograr una vida más grata. Son muchas las personas que han cambiado sus hábitos con estos consejos, y los efectos positivos en la vida de estas personas es lo que ha convertido a esta obra en toda una joya del desarrollo personal.
Primer acuerdo: Sé impecable con tus palabras
Las palabras tienen poder, y eso es un hecho completamente aceptado y comentado en cada rincón del mundo. Las palabras tienen tanto poder como un hechizo y dependiendo de las intenciones que tenga la persona que las emite, pueden ayudar o destruir a alguien.
Nuestras opiniones pueden pesar considerablemente en la vida de los seres humanos. En palabras de Miguel Ruiz “todo ser humano es un mago, y por medio de las palabras puede hechizar a alguien o liberarlo de un hechizo”. Cuando emitimos opiniones debemos ser tan impecables como sea posible. Porque nuestra opinión puede ser una liberación o termina de reforzar un acuerdo negativo que otra persona haya sembrado.
Se habla de acuerdo, cuando aceptas una creencia, una opinión, una idea y la internalizamos. Vivimos con una serie de acuerdos que no son del todo positivos y que han llegado a nuestras mentes y a nuestras vidas por medio de otras personas a los que también les han sido inculcadas.
Reflexión sobre el primer capítulo
En resumen, el acuerdo plantea que lo mejor que podemos hacer para vivir plenos y tranquilos es elegir hablar con amor o callar, no juzgar, y decir sólo palabras que unan y motiven. Estas son rejillas que purifican nuestras palabras y las dulcifican para convertirnos en hechiceros de energía positiva.
Cuando Ruiz establece el nombre de este acuerdo, busca enfatizar la impecabilidad de las palabras, y las palabras libres de pecados son tan puras cual si fueran pasadas por las rejillas y coladores que anteriormente se mencionan.
Pero esto no solo aplica para la comunicación con tu entorno, también aplica para ti mismo. Ya que, como es bien conocido, somos nuestros peores jueces. Y es que la mejor forma de valorarse a sí mismo es asumir nuestro comportamiento sin juzgarnos o reprocharnos constantemente del pasado y de nuestras acciones.
Por otro lado, el entorno y nuestro interior están intrínsecamente ligados. De manera que, si eres una persona con un gran amor propio, también eres una persona capaz de emanar ese amor a los demás. Así pues, si no te juzgas a ti mismo, también serás incapaz de juzgar a los demás.
El poder de las palabras
Según el autor, las palabras son tan poderosas que se convierten en acuerdos una vez aceptadas. Muchos acuerdos son negativos y los tenemos arraigados: palabras que emitió una persona en medio de un episodio de molestia, una opinión negativa de mamá, un comentario en la escuela y más. Todas ellas construyen heridas y complejos que se mantienen a través de los años si son aceptadas por el receptor.
Todos tenemos el don de sumar a estos complejos o romper estos acuerdos y transformar la percepción de sí mismo para una persona. Si deseas romper estos acuerdos en ti mismo, debes comenzar por evitar ser propagador de estos complejos. Así, tus heridas irán sanando y podrás crear una nueva percepción de ti mismo.
Y por último, nunca olvides que entre más impecable seas con tus palabras, más amor obtendrás de vuelta en tu vida.
Segundo acuerdo: no te tomes nada personalmente.
Los acuerdos siguientes son si se quiere, continuaciones del primer acuerdo, y es que el segundo se trata de no tomarse nada personalmente, pase lo que pase.
Si a pesar de ser una excelente persona, impecable con tus palabras, aun te topas con personas que pretenden ofenderte, humillarte o desprestigiarte, no te lo tomes personal. Luego de leer el libro los 4 acuerdos entenderás que estas palabras no son para ti, es un reflejo de lo que esa persona piensa de sí misma.
Si en algún momento te tomas personalmente alguna opinión que digan sobre ti es porque inconscientemente estás de acuerdo con ello. Y tan pronto como estás cónsono con esa opinión, el veneno y los sentimientos negativos recorren tu cuerpo y caes en el mayor de los problemas del egoísmo, el pensar que eres el centro de atención y el mundo gira en torno tuyo.
El origen puede provenir de nuestro período educativo, en donde aprendimos a tomarnos todas las cosas de forma personal, y nos dió por sentirnos responsables de lo que sucede a nuestro alrededor.
Por ello es importante señalar que así alguien te insulte directamente, sus palabras no tienen nada que ver contigo. Lo que esa persona piensa, lo que hace y lo que dice responden a los acuerdos que en algún momento llegó a establecer en su propia mente. Es decir, este punto de vista se formó por la programación recibida mientra estaba siendo domesticado.
El resultado
¿Qué pasa cuando tomas esas opiniones de forma personal? te sientes ofendido y reaccionas defendiendo tus creencias y creando conflictos. Pero realmente más allá de defenderte, estás aceptando ese veneno y dándole peso para apropiarse de tu conciencia.
Las opiniones de los demás son una muestra de lo que esa persona piensa de sí mismo, por eso es tan importante ser impecable con nuestras palabras. Ya que al final del día te pesarán más a ti que a la persona a la que se las has dirigido.
La autopercepción
Debe señalarse también, que esta situación puede presentarse en uno mismo. Puedes llegar a tener pensamientos negativos acerca de tu persona, que son un reflejo de viejos hábitos y que al igual que los comentarios externos, debes ignorar. Con solo entender que estos comentarios no son reales, sino un reflejo de acuerdos anteriores, es suficiente motivo para ignorar y descartar el pensamiento.
Cuando se acepta este segundo acuerdo, se es capaz de viajar por todo el mundo con el corazón abierto por completo y sin recibir heridas de nadie. Podrás demostrar tu amor sin miedo a ser ridiculizado, podrás ser tú mismo sin miedo a ser juzgado y hacer lo que quieras sin miedo a ser señalado.
Tercer acuerdo: no hagas suposiciones.
En muchas ocasiones, sentimientos de tristeza y situaciones de drama que se pueden haber experimentado se originan por suposiciones hechas, y cosas que se tomaron personalmente. El problema es que creemos que lo que suponemos es cierto. Nos hacemos suposiciones sobre lo que los demás hacen o creemos que están pensando. Y luego los terminamos culpando y reaccionamos enviando negatividad con nuestras palabras.
Creamos enormes problemas por imaginar escenarios y tomarlos personalmente. Y antes de que la otra persona siquiera pueda hablar, ya estamos molestos y dispuestos a mostrar lo peor de nosotros mismos.
Un buen ejemplo de lo problemático que pueden llegar a ser las suposiciones es en las relaciones de pareja. A menudo, nos hacemos la suposición que nuestra pareja tiene la certeza de lo que pensamos, y que no es necesario que le digamos lo que queremos. Si no hace lo que teníamos concebido como lo que debería hacer, nos empezamos a sentir heridos y decimos: “Deberías haberlo sabido”. Y realmente, el error radica en suponer.
Si los demás nos dicen algo, suponemos, y si por el contrario, no nos dicen nada, igualmente lo hacemos. Solo para satisfacer nuestra necesidad de saber y terminar reemplazando la comunicación. Pero también existen suposiciones sobre nosotros mismos, la más común de todas es “mi amor cambiará a esa persona” y es mentira. Tu amor no es capaz de cambiar a alguien, porque el cambio es un trabajo interno y personal.
El resultado
Lo que recibes de esta suposición es una herida, decepción y te resta valor. Antes de suponer acerca de ti mismo, es importante ponerte a prueba, hacerte preguntas y medir tus capacidades. A veces, puedes ser más capaz de lo crees, o quizás, no es tan fácil para ti como pensabas.
Encuentra tu voz para preguntar y decir lo que quieres, esa es la mejor forma de evitar las suposiciones externas. Y así comenzarás a vivir con más paz y armonía a tu alrededor.
Cuarto acuerdo: haz siempre lo mejor que puedas
Independientemente del resultado que puedas llegar a obtener con tus acciones, prosigue siempre con lo máximo que puedas, ni más ni menos. No te sobre-esfuerces pero tampoco flaquees en tu objetivo, solo de esa manera lograrás crear hábitos positivos en tu vida.
Se dice que mientras los pesimistas se quejan, los optimistas mejoran el mundo. Y mientras un mediocre busca excusas para no hacer algo, el excelente ya lo ha hecho.
Este acuerdo también te motiva a sembrar lo mejor para que solo lo mejor recojas. Ponte como límite hacer lo máximo que puedas en todas las circunstancias de tu vida. Que no importe si te encuentras enfermo o cansado. Cuando siempre das el máximo de lo que puedes, no te juzgarás a ti mismo en modo alguno por no haber hecho lo necesario.
Si haces lo máximo vivirás con gran intensidad. Siempre serás productivo y al mismo tiempo bueno contigo mismo, sin caer en sobreexigencias u obligarte a abandonar otras actividades importantes. Dar ese máximo en lo que puedas, significa actuar porque amas hacerlo, y no por el hecho de que esperas una recompensa. Amar lo que haces es aprovechar cada momento de tu vida, y esto por su parte, es vivir significativamente.
Sé libre
Atrévete a romper viejos acuerdos, da lo mejor de ti por tus nuevos objetivos y sé bueno con tu entorno tanto como contigo mismo. Así tu vida será lo más cercano a la felicidad que has experimentado hasta ahora. Te da la garantía de todos esto el libro los 4 acuerdos.
Deshazte de los comentarios negativos del pasado, perdona y perdónate por juzgarte constantemente, y aprende a emanar el amor que sientes en tu interior. Atrévete a ser como eres, reconstrúyete y descubre lo que realmente deseas ser y hacer en lo que te resta de vida. Porque solo de esa manera podrás darle sentido a tu existencia.
El libro los 4 acuerdos son una guía para convertirte en una mejor persona y crecer a nivel personal de la manera más pura y significativa que existe. Es una obra que promueve el amor propio, la convivencia respetuosa e incentiva a la autorrealización del individuo. El libro los 4 acuerdos te ayudará a ser la persona que deseas, a amar intensamente y vivir significativamente.